Copos de avena con chocolate

¿Quién ha dicho que comer sano es incompatible con disfrutar de cosas deliciosas?

Con este desayuno vais a comprobar que es todo lo contrario.

Volver a reencontrarnos con la naturaleza a través de la comida nos lleva a recuperar nuestros sentidos.

Estamos tan acostumbrados a comer cualquier cosa que ignoramos que hemos olvidado el sabor real de lo que entra en nuestra boca.

Son tantos los ingredientes que utilizamos, tantos los añadidos en las comidas preparadas y en los alimentos procesados que consumimos que el gusto lo estamos perdiendo poco a poco.

No nos paramos a disfrutar de ese maravilloso sentido del gusto que nos puede llevar a deleitarnos a través de lo que comemos.

En esta ocasión os propongo este delicioso desayuno de avena con chocolate.

Veamos algunas de las ventajas que nos aportará a nuestro organismo. La avena es un cereal muy completo y equilibrado. Junto a los carbohidratos y la fibra, aporta más proteína, grasa y minerales que otros cereales. También nos aporta buenas cantidades de magnesio, cobre, hierro, zinc y vitamina B, así como pequeñas dosis de calcio y ácido fólico. Al ser antioxidante beneficia al sistema cardio-bascular y reduce el colesterol LDL. Además produce un efecto prebiótico en el intestino y regula los niveles de azúcar.

Uno de los mejores beneficios del cacao es que reduce los niveles de colesterol LDL y eleva el HDL, el llamado colesterol “bueno”. Esto se produce gracias a su poder antioxidante, que además ayuda a controlar la diabetes y la sensibilidad de la insulina. Además mejora el flujo sanguíneo y disminuye la presión arterial.

La leche presenta una variedad nutricional muy rica porque contiene calcio, fósforo, magnesio, zinc, yodo, selenio y vitaminas A, D y del complejo B.  Su alto contenido en calcio y vitamina D favorece el desarrollo y mantenimiento de los huesos y la buena salud de los dientes.

La avellana es un sabroso fruto seco repleto de nutrientes. Resulta un gran aliado del corazón y una buena fuente de antioxidantes. Es también muy nutritiva por su elevado contenido en grasas saludables y proteínas.

Ahora que ya conocemos algunas de las propiedades y beneficios de este saludable desayuno sabemos que con solo estos cuatro ingredientes vamos a empezar el día con energía además de buen sabor.

He utilizado en esta ocasión:  

  • 4 cs. colmadas de avena integral
  • 1 onza de chocolate con 85% de cacao
  • 6 avellanas tostadas sin sal
  • 1/2 taza de leche desnatada

Veamos ahora la preparación:

En la taza he añadido la avena y he mezclado trocitos de chocolate. Luego le he añadido la leche hasta que he cubierto el contenido y la he introducido al microondas durante un minuto.

Estas son las cantidades con la espesura que a mi me gusta, pero podéis hacer otras que a vosotros os gusten más.

Después he añadido por encima más trocitos de chocolate, las avellanas y he espolvoreado chocolate rallado por encima.

Y ya solo queda disfrutarlo.

cs. son cucharadas soperas.


Espirales con salsa de tomate, ternera y albahaca

Llevo ya algunos meses comiendo cereales integrales y la verdad es que me sientan bien así que hoy utilizaré pasta integral en esta receta.

La pasta integral al ser muy rica en nutrientes nos aporta gran cantidad de minerales y vitaminas. Es especialmente rica en fibra dietética, antioxidantes, proteínas, vitamina E, vitaminas del Grupo B y grasas totalmente saludables.

También es rica en minerales como calcio, hierro, fósforo y magnesio. La pasta integral favorece el metabolismo y ayuda al tránsito intestinal.

Es ideal para personas que desean bajar de peso, pues tiene poder saciante. Además resulta muy saludable para el organismo, ya que no genera colesterol ‘malo’ LDL y permite mantener el equilibrio del colesterol ‘bueno’ HDL.

Está claro porque debemos utilizar este tipo de pasta y abandonar el uso de las harinas refinadas.

Para la receta de hoy estos son los ingredientes que he utilizado: 

  • 1 vs. de espirales integrales
  • 4 cs. de salsa de tomate casera
  • 80 gr. de carne de ternera picada
  • 1 ajo
  • 1 cs de aceite de oliva
  • sal al gusto *
  • perejil
  • albahaca

Empiezo poniendo una cacerola con agua en el fuego a la que le añadí un poco de sal.

Yo suelo poner muy poca cantidad e incluso en ocasiones no pongo nada, pero la pasta es demasiado sosa y por eso le pongo un poco.

Espero a que empiece a cocer y añado la pasta.

La he tenido cociendo hasta que ha tenido la consistencia que a mí me gusta ni muy dura ni muy blanda, más o menos unos 10 minutos.

Después la he puesto en un colador para que escurriese el agua.

Mientras  he salteado con una cucharada de aceite de oliva la carne de ternera que he picado yo misma y la he añadido sal, ajo y perejil.

También he calentado la salsa de tomate que preparo normalmente y que podeis ver en este enlace o al final del post.

Y ya está, solo he tenido que montar el plato que os presento y añadirle un poco de albahaca.

¿Qué os parece la pinta que tiene?

Ha quedado delicioso.

Espero que si os animáis a hacerlo lo disfrutéis tanto como lo he hecho yo.

cs. cucharada sopera y vs. vaso de agua

*yo suelo usar muy poca sal porque me gusta apreciar los propios sabores de lo que como por eso nunca os pongo cantidad en las recetas.

¿Te gustaría ver la receta de la salsa de tomate?


Batido de zanahoria y naranja

En español batido o licuado, en inglés smoothie.

Seguramente habrás oído hablar de ellos porque ya hace algún tiempo que se pusieron de moda.

Es una manera cómoda de consumir las frutas y verduras que nos son tan necesarias y que a algunos les cuesta tanto tragar.

Además están exquisitos y son muy nutritivos.

Yo los utilizo para desayunar y también para la merienda.

A mi me gusta que queden más bien como si fuera un puré y comerlos con cuchara, pero en esto como en todo hay gustos.

Vamos a ver ahora algunas de las muchas ventajas que recibirá nuestro cuerpo al tomar este rico batido.

Las zanahorias contienen varias vitaminas, en especial: vitamina A, vitamina E y vitamina K. También tienen altas cantidades de betacaroteno, que es un pigmento que se transforma en vitamina A dentro de nuestro organismo. Son una fuente importante de hidratos de carbono. Son también ricas en potasio y fósforo, y excelentes para mentes cansadas y para restaurar los nervios y además fortalece las uñas y el cabello, al que le aporta brillo.

La naranja es un poderoso antioxidante por la gran cantidad de vitamina C que contiene, por ello favorece la cicatrización y refuerza es sistema inmunológico de organismo. También contiene calcio, magnesio, beta caroteno, ácido fólico, fósforo y potasio, entre otras cosas. Es rica en agua y fibra alimentaria, por lo que tiene una gran eficacia saciante.

La manzana es fuente de calcio y fósforo, indispensables en la formación de las sales minerales del hueso. También aporta vitamina C, que interviene en la formación de la sustancia matriz del hueso.

Y una vez conocidas algunas de las ventajas de tomarlo vamos a ponernos manos a la obra.

Para hacer esta deliciosa receta he necesitado:

  • Una zanahoria mediana
  • Media naranja
  • Media manzana
  • 1/2 taza de leche de avena

De esta última he utilizado media taza porque como os he explicado antes a mi me gusta que la consistencia sea espesa pero en el caso de que os apetezca que sea más ligera e incluso como si fuera un zumo solo tendríais que añadirle más cantidad e incluso agua.

Como veréis es muy sencillo.

Solo tendréis que trocear todos los ingredientes en la jarra de la licuadora o batidora y darle al botón.

Lo vertéis en el recipiente en el que vayáis a tomarlo y ya podéis sentaros a disfrutar de él porque os puedo asegurar que lo haréis.

Y si queréis deleitaros también con la vista y prepararlo como en mi presentación solo tendréis que añadirle unos trocitos de manzana y media nuez.

Os dejo disfrutarlo.


Comienza mi reto personal

He tomado la decisión de dar un cambio importante en mi vida para ser más coherente con lo que pienso sobre la gran oportunidad que nos está brindando esta situación que estamos viviendo por causa de la pandemia por el covid 19, como ya os comenté en el post anterior.

Como pienso que soy la responsable principal de mi cuidado personal y por lo tanto de mi salud he decido comer aún más sano de lo que lo hacía antes.

Después de tener cáncer de colon en 2017, estuve cuidando lo que comía pero me he dado cuenta de que me había relajado y esto añadido a la inactividad que durante casi dos años he tenido por la enfermedad que padecí me han llevado a tener bastantes kilos acumulados que he decidido perder, al igual que la costumbre de comer cosas que no me sientan bien porque no son saludables.

Llegué a pesar 72 kilos. Esta era yo el 21 de enero de este año.

Ya llevo una semana con mi cambio en la alimentación así que he decidido compartirlo con todos vosotros.

He pensado que compartir esta parte de mi experiencia y de mi manera de ver la vida a través de ella me podría acercar aún más a aquellas personas que como yo piensen que las quejas y el echar la culpa a los demás de todo lo que nos sucede a lo único a lo que nos lleva es a seguir cayendo en ese pozo de sufrimiento en el que estábamos antes de descubrir que solo nosotros podemos cuidarnos y amarnos antes de que lo puedan hacer los demás.

Así que me dispongo a compartir con vosotros esta experiencia y este modo de vida que a mi me hace feliz.

Como os dije antes llevo apenas unos días con este cambio en mi alimentación y ya he notado mejoras en mi cuerpo.

Lo primero que he notado es que no siento hambre ni la necesidad de comer que tenía antes.

La verdad es que en estos días de confinamiento, además de la escasa movilidad no paraba de hacer viajes al frigorífico, sobre todo por la noche cuando estaba viendo el televisor.

Creo que no era por hambre realmente sino por necesidad de comer, por ansiedad. Así que esto ya no lo necesito.

Lo segundo que he notado es que tengo unas digestiones mejores y menos inflamación de tripa y que los molestos y desagradables gases han desaparecido.

También me siento mejor conmigo misma y he retomado las ganas de hacer cosas que últimamente había perdido, así que el cambio ha sido de lo más positivo.

Voy a ir compartiendo con vosotros los menús de lo que tomo cada día y los cambios de mi cuerpo.

Y también he pensado en compartir las recetas de los menús que hago y que son muy sencillas.

Por supuesto que no soy experta en nutrición y que no pretendo que sigáis mis consejos.

Tan solo pretendo compartir mi experiencia y por supuesto que agradeceré vuestros maravillosos comentarios con las aportaciones que queráis hacerme.

En cuanto a mi alimentación debo deciros que quiero que sea lo más sana posible y que para ello lo primero que voy a hacer es eliminar de ella prácticamente los alimentos procesados y preparados.

También he cambiado la harina y la pasta por las que contienen cereales integrales.

Además he suprimido el azúcar (sobre todo el refinado) y he reducido bastante la sal (incluso en ocasiones no la pongo). He introducido también bebidas vegetales y verduras crudas, además por supuesto de las cocinadas.

En cuando a carnes tomo pollo, pavo, ternera (ésta solo una vez a la semana) y todo tipo de pescado.

Todo esto que en principio puede echar para atrás os aseguro que es mucho más agradable de lo que imagináis.

Además camino durante una hora después de la comida y de la cena.

Empiezo mi reto con un peso de 68,300 kg, y una primera receta que os pondré en el siguiente post.

Espero que este cambio en la página os siga gustando lo mismo que mis reflexiones.

Al fin y al cabo hay hay que cuidar de la misma manera mente, cuerpo y alma si queremos sentirnos bien con nosotros mismos y también con los demás.

Y tú que piensas.

¿Te animas a hacerlo conmigo?

¿Quieres saber que sucedió después de quince días?