Tardé bastantes años en darme cuenta de que cuando mis sentimientos eran negativos, evitaba decir lo que sentía.
Además descubrí que para evitar situaciones en las que me sentía mal, porque me causaba sufrimiento el aceptar que no me amaban, yo siempre disculpaba a la persona que me pudiera estar provocando esos sentimientos.
Pensaba que lo estaría haciendo sin querer, que no sentía realmente lo que decía, que lo hacía así porque estaba enfadad@ conmigo o con lo que fuera.
Esto me sucedía no solo con las personas que amaba.
Terminó siendo mi manera de protegerme cada vez que me sentía vulnerable.
Esos pensamientos me hacían sobrellevar situaciones en las que personas muy importantes en mi vida me maltrataban, y a la vez me hacían ignorar lo que me estaba sucediendo en realidad.
Por supuesto que ignoraba que al hacer esto yo estaba permitiendo que volviesen a hacerlo una y otra vez con impunidad puesto que yo era la primera en disculparlos y perdonarlos sin que ni tan siquiera ellos me pidiesen disculpas.
Pero lo que también desconocía era que al hacerlo yo no me amaba y no cuidaba de mí y que evitando poner límites a las personas que me hacían daño yo misma era la que me estaba exponiendo a que continuaran haciéndolo.
Y lo más importante: que queriendo evitarme sufrir era yo misma la que me estaba causando el mayor sufrimiento.
Solemos pensar que las personas importantes en nuestra vida tienen que amarnos, pero ignoramos que para que esto suceda estas personas tienen que amarse a ellas mismas primero y en demasiadas ocasiones esto no es así.
Nadie puede dar a otras personas lo que no tiene para sí mismo.
El poner límites a personas a las que amamos y que, por su desconocimiento de lo que es realmente el amor, lo que crean con nosotros son relaciones de dependencia, es la única manera de amarnos a nosotros mismos y de enseñar a amar a esas personas también, aunque a ellas al principio no se lo parezca.
Habrá ocasiones en que los límites nos llevarán a tener que alejarnos de esas personas porque será la única manera de poder sanarnos y de que ellos puedan tener alguna oportunidad de poder amarse y sanarse también si llegan a plantearse que nuestro alejamiento tiene que ver con su actitud.
Pero ese será su problema porque al igual que nosotros ellos deben también cuidar de si mismos y no es nuestra responsabilidad conseguir que lo hagan.
Cada uno debemos de responsabilizarnos de nosotr@s mism@s para solo así poder amarnos.