Hay personas que confunden el desapego con la frialdad emocional.
La distancia afectiva que establecen las personas frías emocionalmente suele ser la manera que encuentran para protegerse de una posible herida causada por alguien externo.
Ponen límites emocionales que les permiten rodearse de la coraza que necesitan para no sentirse vulnerables.
Esta frialdad, en realidad, esconde una enorme necesidad de cariño.
Estas personas necesitan controlar las relaciones para sentirse seguros porque sienten que si abren su corazón a otra persona, en cualquier momento pueden ser abandonados.
El desapego sin embargo, es todo lo contrario.
Tiene que ver con la confianza.
Con el soltar el control y confiar en que lo que vaya a suceder siempre nos va a enriquecer.
Con estar abiertos a descubrirnos y a amarnos a nosotros mismos a través de conocer y amar a la otra persona.
Con aceptar que nadie es posesión de nadie y que para que alguien nos ame tiene que ser libre de decidir si quiere estar o no con nosotros.
Con saber que la causa de nuestro sufrimiento es siempre lo que nosotros pensamos sobre lo que nos sucede.
En definitiva, con ser conscientes de que somos nosotros mismos los únicos que nos podemos proporcionar felicidad.
¿Tu que piensas?
Déjame un comentario. Me interesa conocer tu opinión.
¿Sabías que si escuchases más a tu corazón te evitarías sufrimiento?
EXCELENTE!!
Gracias Luz